Si tuviera que describir las Fores de Bach, diría que son un remedio mágico para el crecimiento personal, emocional y espiritual.
Más allá de mi descripción, las Flores de Bach son un sistema terapéutico completo, que se compone de 38 remedios, descubiertos por el Dr Edward Bach entre los años 1928 y 1935.
El Dr Edward Bach, era una persona muy sensitiva y espiritual, y creó este sistema terapéutico para tratar al individuo de una manera holística, por eso hoy en día, las Flores de Bach, son usadas como una herramienta para el crecimiento personal .
Es importante saber, que para tomar las flores, es recomendable acudir a un terapeuta floral, ya que después de una entrevista con el cliente ,el terapeuta podrá valorar, qué es lo prioritario a tratar.
Siempre explico a mis clientes, que una buena fórmula es la base del éxito para conseguir buenos resultados.
Cada persona es única y como tal, debemos actuar de una manera impecable para poder llegar al máximo beneficio terapéutico para la persona que tenemos delante.
Las Flores de Bach, actúan, de fuera a dentro, como si de una cebolla se tratará.
Trabajando desde la capa más externa de la cebolla, se van abriendo otras capas, que vamos trabajando, para que vaya aflorando todo aquello que nos ha llevado a ese malestar. De esa manera nos aseguramos de que con un camino firme, llegaremos a equilibrar todo aquello que se ha ido guardando y ha hecho que nuestra mente, nuestras emociones e incluso nuestro físico se haya desequilibrado.
Debe quedar claro que las Flores de Bach no sustituye ningún tratamiento que la persona
esté siguiendo, ni pretende sustituir ningún tratamiento médico prescrito por un profesional de la salud, pero como sistema de apoyo, es una herramienta muy, muy valiosa.
En mi camino como terapeuta floral, he tenido muchas alegrías y cada día que pasa estoy más orgullosa y confiada de este gran legado que nos dejó el Dr Edward Bach.
Aceptar nuestras sombras y sanar cada pedacito de experiencias que nos han llevado a nuestro presente, es el camino más firme y duradero para llegar a brillar con luz propia.
Marian Sendra
Belleza y Bienestar
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